La secuencia lineal de aminoácidos de una proteína
representa a su estructura primaria. Cuando en la cadena polipeptídica
se establecen puentes de hidrógeno entre sus aminoácidos y
los ángulos que flanquean a los enlaces peptídicos del esqueleto
son regulares, adquiere una estructura secundaria en α-hélice o en
β-lámina. La interacción entre los aminoácidos de
la α-hélice y la β-lámina produce la estructura terciaria que
es la forma en la que la proteína se dispone en el espacio; esto
ocurre al establecerse puentes eléctricos e interacciones hidrofóbicas
entre los residuos de los aminoácidos, así como puentes disulfuro
entre dos cisteínas. La estructura cuaternaria está definida
por la interacción de dos o más cadenas polipeptídicas
que integran a una proteína, como la hemoglobina, que está
formada por dos cadenas alfa y dos beta
Imagen.
Las proteínas pueden ser holoproteínas, compuestas sólo
por polímeros de aminoácidos, o heteroproteínas, esto
es, que contienen biomoléculas no proteicas como lípidos, carbohidratos
o ácidos nucleicos, que se añaden por modificaciones postraduccionales
Tabla. Dentro de las holoproteínas
se encuentran las proteínas fibrosas, que son proteínas que
suelen jugar un papel estructural y son insolubles en agua, como la colágena
de tejido conectivo; y las proteínas globulares, que son solubles
en agua. Éstas se encuentran en citoplasma, lumen, matriz y membrana,
un ejemplo es la acetilcolinesterasa.